Uni ganó con la "Azul y Negra" bien puesta

Aunque en realidad jugaron con la blanca, los chicos de la primera caballeros demostraron que llevan la AZUL Y NEGRA bien puesta. Le ganaron al Jockey 3-1 coronando un fin de semana redondo para el club, que había comenzado el sábado con varios triunfos en la línea B y el domingo con las victorias en Sub 12, Cuarta Damas y Sexta e Intermedia Caballeros, mientras que la tercera fecha de la Liga Nacional Damas fue suspendida.
La verdad que ser de UNI es un orgullo, una verdadera pasión.
Quedó demostrado que cuando los caballeros de Uni juegan en Rosario, una multitud los acompaña para ver el buen juego que los chicos despliegan. No solo la gente del Club que está siempre, sino también de otros clubes que se acercan a ver buen hockey. Y ayer no fue la excepción.
La cita era en el country del Jockey, con cancha de agua (embarrada) y puente incluido. Prometía ser un domingo de gloria. Y así fue. La sexta caballeros logró su primer triunfo y la intermedia deslumbró en la previa del plato fuerte, la primera.
El equipo salió a la cancha y en las tribunas apareció el humo azul y el sonido del redoblante se escuchó en todo Fisherton.
El comienzo del partido fue un poco raro, ya que Uni no salió a presionar como se podía suponer y esperó a su rival en mitad de cancha, lo cual terminaría siendo una estrategia demoledora en el segundo tiempo.
Jockey se puso en ventaja en una desconcentración nuestra, pero el equipo no se desesperó.
Logró el empate tras un libre dentro de los 5 metros que rodean el área, bien desviado en primera instancia por Seba Ronco y empujado a la tabla por Joaquín Alvarez, quien agrandando el arco marcó su primera conquista en Primera División. Y vaya si fue importante para iniciar la reacción azul y negra.
En el complemento, el verde se abroqueló atrás, empujado por el dominio de la visita. La historia empezó a pesar, Uni llegaba por uno y otro costado y logró imponer su juego. Tras varios corners corto malogrados, Manu Brunet estableció de rebote el 2-1 para el delirio de la gente.
El desmoronamiento de la estrategia local, llegó por decantación cuando Charly Young liquidó el encuentro. Recibió dentro del área y definió de revés al arco vacío tras eludir al arquero. Solo quedaba festejar con la de Uni bien arriba, enarbolada en su palo cual estandarte de gloria.
Fue una tarde donde la historia se hizo presente.
La paciencia fue clave para demostrar en el torneo Metropolitano A de Buenos Aires, quien manda en Rosario desde hace más de una década.
Las notas del partido en E-hockey:
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